BLOGGER TEMPLATES AND TWITTER BACKGROUNDS »

miércoles, 10 de marzo de 2010

"Distracción"




Del silencio aparecen lentamente una serie de sonidos
Una imitación de la naturaleza
Los sonidos parecen describir la noche
Y estos no dejan de existir en ningún momento
La noche es infinita

Es interrumpida de pronto por un simple fraseo de guitarra
Son tan solo 3 notas que marcan un ritmo funesto
Arrebata lentamente cualquier rastro de alegría
Si - Sol - Mi una y otra vez
Acompañados por una voz distorsionada
No puedo entenderla

La tarde va cayendo a su único y especial ritmo
Lo que puedo ver sobre mí son árboles
Sumamente altos y vigorosos
Pero pueden verse sus ramas desnudas
Lo que les confiere una imagen de vulnerabilidad
"Puedes contar conmigo" escucho
Asiento desganadamente
Como si no lo tomara en serio

La secuencia de notas cambian brevemente
El sonido de la noche parece ganar intensidad
La noche se torna más compleja por un momento
La voz parece cantar algo que su alma necesita decir

Silencio
Para volver al Si - Sol - Mi original
Ahora con más presencia de batería
Y la noche infinita


" Arregla tu vida "
escucho
Me tomaste por sorpresa
No esperaba jamás que me dirías eso
Al principio me sentía tan fuerte
Como si no me hubiese afectado te confieso
Pero ahora es que vengo a darme cuenta
De que no he podido superarlo
Lo admito
No lo he superado

La batería gana una fuerza inusual
Acompañada de vientos
Casi no escucho la noche
Solo la guitarra desganada
Para ser interrumpida por gritos
No puedes de sacar de tu mente los gritos

Quien habría pensado que sería capaz de llegar
No es tan bueno como lo pintan
Tengo un miedo real a ir perdiendo el control poco a poco
Creo estar ya perdiéndolo
Y pensar que mi solución es llorar
Pero no puedo hacerlo
No creerías cuanto quisiera poder

Todo terminó
Para darnos cuentas que la noche no se fue
Ahora es más fuerte y oscura que nunca
La noche siempre terminará llevándoselo todo




Paz, Amor y Comprensión
Anonimo

viernes, 19 de febrero de 2010

Demoliendo recuerdos

Pudo haber sido perfecto…

Pero no, no lo fue.

Creí haber salido ileso de la batalla, pero hay heridas que sólo duelen cuando las aguas vuelven a su cauce, y uno está en calma. Hay golpes que atacan cuando uno menos se lo espera, cuando cree haber vencido al enemigo, cuando se siente seguro. Hay dolores que aún hacen daño después haber dolido.

Estuve encerrado en mi propia burbuja de autocontrol, manteniendo a raya el corazón, midiendo cada latido, cerrándole el paso al llanto. Pero esta noche se han desbordado mis aguas, arrasando con todo a su paso y llevándose consigo los pocos bastiones de cordura que había en pie en mi cabeza. Tal parece que no fui capaz de tomar acertadamente mis decisiones, y por ello aún ahora me persiguen las consecuencias de esas acciones.

Es difícil despertar un día con las manos vacías, después de haberte ido a dormir con el corazón contento. Es complicado, es extraño, es incómodo. Cuesta aceptar que lo que en otro tiempo fue tangible y perfecto, ahora no es más que una vaga ilusión, un sutil espejismo que tomó como víctima a la conciencia, que necesitada de algo en qué creer se dejó seducir tan espléndidamente… pero la realidad es tan cierta como el dolor, la verdad persiste, dando a entender que la pesadilla continúa después del sueño, y que por más que abras los ojos… el mundo no va a dejar de desmoronarse alrededor.

Toca sacar fuerzas de donde no las hay…

Toca levantarse de nuevo, tomar las herramientas y comenzar a demoler los recuerdos, a tumbar las paredes, a borrar las palabras escritas en las paredes de la memoria… romper con todo, acabar con el pasado y comenzar desde cero en un nuevo camino, donde la experiencia vivida y los errores cometidos sean, en vez de adversarios, fieles aliados a la hora de devolver las obras.

Aún hay tiempo, tiempo de evitar la caída, de amortiguar el impacto…

Aún es posible escapar de la muerte segura que significa dejarse vencer por la oscuridad.

|Ed|

lunes, 8 de febrero de 2010

Un Venezolano!!!

"PODRÁS ROBARTE LOS ZAPATOS PERO NO EL ALMA DEL CORREDOR."





¿Como estás Hugo? ¿Arrecho? ¿ladillado de que nada te salga bien? ¿harto de la incompetencia que te rodea? Te entiendo, debe ser frustrante la vaina, pero yo, de pana y todo, te tengo la solución.

Has dividido el país en dos toletes, los que te aman y los que te despreciamos. Dividiste mal, ese es tu problema, que no supiste hacer la raya de división.

El país ya estaba dividido antes de que tú llegaras, pero no como tú crees, en ricos y pobres, sino en competentes e incompetentes.

Los competentes, crean, crean riqueza, crean progreso, crean dinero, crean empleo, crean belleza, y aunque suene loco y redundante, crean creación.

Los otros, no crean nada, son mendigos, ojo, que eso no quiere decir que no tengan dinero, pueden tenerlo, pero no saben crear.

Sabes, es como... imagina dos tribus que llegan a un isla, una isla hermosa y llena de animales comestibles, y frutas y vegetales y todo eso.

Una tribu se dedica a recolectar y cazar lo que consigue, la otra decide crear formas de sembrar, de criar animales, de luchar contra la naturaleza para depender lo menos posible de ella. Al cabo de un tiempo, las plantas y animales salvajes empiezan a escasear, así que la tribu cazadora/recolectora empieza a pasar hambre, la otra no, porque la otra no recolecta los alimentos, los crea.

Y ahí está el problema, Hugo, tu dividiste el país en recolectores/cazadores y sembradores/criadores, y te quedaste con los primeros, desechando a los segundos, atacándoles, eliminándoles.

Verás, Hugo, hace años llegó a Venezuela un señor, a un país donde no había televisión, y ese señor tuvo una idea, fundar un canal de televisión ¡imagínate! Una apuesta peligrosa, un canal de televisión en un país donde nadie tenía un televisor ¿le gustaría a la gente? ¿estaría dispuestos a pagar por un aparato para ver su idea cristalizada? No era apuesta simple, pero él apostó.

Y esa mente brillante se rodeó de montones de gente, de los más capaces, los más creativos, los más sabios, los más trabajadores, desde ingenieros innovadores a obreros capaces, y él, en el centro, coordinando toda esa maravilla.

Y ese canal fue representación de lo que podemos hacer los venezolanos, de hasta que punto el ingenio y la constancia pueden construir, hasta que llegaste tú, y te quisiste apoderar de la obra creada. Entonces le prohibiste transmitir en señal abierta, para tener la excusa de robarles su obra. Pero no te funcionó, por alguna razón extraña, lo que en sus manos era un canal rentable y muy visto, en tus manos se convirtió en un adefesio espantoso e inútil que da pérdidas.

Hoy terminas definitivamente con ese canal (o al menos eso crees), porque no puedes soportarlo, su existencia te recuerda que robar no te sirvió de nada.

Y así te pasa siempre, Hugo, es una constante, haciendas productivas que en tu manos son eriales, canales de rating que hasta exportan programas se convierten en bodrios que no ven ni los que te apoyan, industrias productivas que trocan en otras quebradas, hoteles que terminan siendo pensiones de mala muerte, mercados que acaban en bodega, bancos que acaban en lupanares de usureros...

Y así todo, así siempre...


¿Que pasa, Hugo? ¿por que nada te funciona? ¿como es que robas cadenas de oro y acabas con collares de plástico? ¿Que falla, Hugo? ¿que falla?

Tienes el dinero, tienes la fuerza, tienes el poder ¡y no te funciona! ¡nada te funciona! Has gastado millones en armas, para amedrentar, para intimidar, tienes ejércitos regulares e irregulares bajo tu mando para oprimir, has comprado voluntades.. ¡y nada funciona!! ¡no te funciona! !!!

Y no entiendes, eres presa de la ira porque no entiendes que es lo que no funciona, porque usando tantos recursos no logras ya no crear, sino siquiera mantener lo que esos hombres hicieron.

Yo sí lo sé, Hugo, yo sé cual es el problema, yo sé donde está tu fallo. El error es que no has expropiado la piedra angular de todo esto, no has expropiado lo que hace que un supermercado sea supermercado y no bodega, lo que hace que un canal sea visto y no un bodrio intragable que no ve ni la mamá del director, eso que hace que un hotel esté siempre a reventar y no parezca pensión de mala muerte... ¡el alma, Hugo! ¡el alma! ¡eso es lo que tienes que expropiar!

El alma, eso que hace que un hombre cree, produzca, haga, invente. Esa cosa que permite salvar obstáculos, esa cosa maravillosa que hace que un hombre, una mota de polvo en el universo, se convierta en un gigante capaz de transformar su entorno, de someterlo a sus deseos.

No es dinero, Hugo, tú problema es de comprensión, no es dinero, es amor, es orgullo, es tenacidad, no es ganar cada vez más dinero, es tener una idea, enamorarte de ella, llevar la idea a la realidad, verla crecer, verla formarse, ver que cobra vida y maravillarte diciéndote “eso lo hice yo”, pensar que de no existir tú, esa maravilla no existiría, que está allí porque la pensante, la imaginaste, la hiciste. Es sentir que aunque esa obra no pase a lo mejor a la historia de la humanidad, ni del país siquiera, será parte de la historia de mucha gente, gente que de una u otra forma trabajo en o para ella.

El problema, Hugo, es que cuando expropias, robas, pero solo robas lo físico, robas edificios, muebles, máquinas, pero eso son solo cosas materiales, lo que realmente mueve todo es la suma de voluntades, lo que mueve todo es el cerebro y el alma de millones de hombres y mujeres que hacen que las cosas tengan vida, porque las cosas, cuando no tienen el alma del hombre que las hace útiles, no son nada. Los zapatos, Hugo, no son nada, si no tienen al hombre que les de vida, no son capaces por sí mismos de hacer huellas y marcar camino, son solo una mezcla de cuero, suela, hilos y pega, pero sin la mente del hombre, no son nada.

Y tú, Hugo, eres un pobre ser, un primitivo que piensa que si le robas a un hombre sus zapatos, podrás caminar como él. Lo que tienes que expropiar, Hugo, es el alma, y eso no lo puedes robar, no importa cuántos cañones tengas, ni cuantos macacos vestidos de verde amedrentador envíes, no importa cuánto miedo siembres, ni cuánto dinero regales, no puedes robar el alma ¡y esa es tu arrechera! Que lo que nos quieres quitar, no nos lo puedes quitar, ni siquiera nosotros, aún queriendo dártelo, podemos hacerlo, porque el alma es intransferible.


Lamentablemente, Hugo, tú me puedes quitar mi casa, mi negocio, mi dinero, y hasta mi vida, pero más de eso, no me puedes quitar, puedes incluso romperme el alma, eso no te lo niego, pero no la podrás usar ¡nunca!.


Así que, eso es, Hugo. Eso es lo que debes expropiar para que las cosas te funcionen, y como no puedes...

¡jJÓDETE!



Extraído de correos de internet, escrito por Rocco Amendolara Darwich!!

CL "Nuestra Venezuela Siempre es Primera"